La filosofía ha perdido sus raíces, que flotan, insomnes, en el agua.
La búsqueda del fundamento se pierde cuando se encuentra y al encontrarla se realiza trémulamente, como si hoy no hiciera otra cosa que pedir permiso…
Lo invisible es lo que no ceso de nombrar sin poder nombrarlo. Lo llevaré por siempre mientras tenga un poco de aliento, pero sé que ni siquiera diciendo que lo llevo, alcanzo a nombrarlo.