El poder de los vivos, el poder de los muertos.

“los poderes” es un libro con presagios, adivinación y magia. Es un poemario, un cuerpo en dos partes, en dos planos. Y como todo el libro tiene colaboraciones misteriosas.

Paulina nos convida a entrar en “los poderes” a través de una médium que fue iniciada en los sueños, “donde recibió la palabra y se hizo testigo y vidente; escribe endemoniada/ las lenguas le vienen de por allá/ pasan por su cuerpo como un rayo eléctrico”; dice la autora mientras arma altares para recibir a los muertos. Ellos traen mensajes, traen anuncios, el sueño manda. Los muertos le hablan en sueños, no hay que temer, solo esperar que se vayan y aceptar “los poderes”, escuchar.

Paulina dice que “Escribir es solo un artefacto de pasaje pero también de descarga”, mientras relata un cuerpo que se desploma abatido luego de la experiencia. Pronto aparece otro momento, “otras tierras”, hay un desplazamiento hacia otros bordes, personajes y fronteras. Se desliza entre muertos, vivos, vínculos, saberes, rituales y pérdidas, todos dentro de este caldero en movimiento.

Las ilustraciones son de Nicolás Lepka que logra una narración visual haciendo cuerpo. Experimenta el territorio que propone la autora, como siguiendo las huellas de las migas de pan, y nos sacude al entrar rítmicamente en el ciclo vital de “los poderes”.

El color de este libro es el color de la magia y la transformación, también es el color de la lucha de las mujeres. Este libro es una ofrenda para ellas.