En 1880 una mujer norteamericana, Eliza Jane McCartney Clemens, con sus ideales y prejuicios, llegó para sumarse al proyecto de una nueva escuela. Por recomendaciones para su defensa, trajo un arma, pero las vivencias que aquí experimentó la llevaron a escribir un libro: Rosario, que tal vez constituye la primera mención al nombre de la ciudad en una portada.
Publicado en inglés en 1882 ésta edición es la primera en español.






